martes, 23 de julio de 2013

AREQUIPA DICE "NO" A LA REPARTIJA

Ayer por la tarde decenas de jóvenes, madres de familia, padres de familia, sin conocerse la mayoría, de pronto se vieron unidos por gritos de protesta, entre ellos ¡"no a la repartija"!. Se concentraron en el centro de la ciudad, tomaron el frontis de la Catedral con pancartas y velas para hacer saber su desacuerdo con lo que viene ocurriendo en el campo político, el descaro de los grupos políticos que bien, por lo hecho, pueden ser comparados con cualquier grupo delincuencial. Quién hubiera imaginado tener sentados a la mesa a Ollantistas, Fujimoristas, Toledistas y Pepecistas, creo que ni nuestro bondadoso santo San Martín de Porres lo hubiera podido soñar. Pero la cochinada hace esos milagros, es increíble escuchar frases como "son acuerdos políticos", como lo dijo el congresista, ex burbujito y futbolista fracasado de apellido Beingolea, de cuándo acá un acuerdo político puede ir por encima de principios, este hombre está afectado por cierta ceguera, está perdido y su frase no solo lo pinta a él de cuerpo entero sino al resto de congresistas que apoyaron esta barbaridad. Todo esto ha desencadenado una serie de protestas y Arequipa no puede quedarse callada ante tamaño descaro y menos aún por el currículo histórico que tenemos, como dice el abuelo "a nosotros naide nos pisa el poncho, carajo". 
Pero como en todo hecho humano, también la maldad o la perversidad deja ver el lado contrario, es decir la bondad o virtuosismo, ayer por la tarde y la noche se vio mayoritariamente en la Plaza de Armas a jóvenes de toda condición social, de distintas universidades, de varios colores (como es el Perú, y enhorabuena) gritando a cuello suelto, bastaba verlos para saber que realmente estos jóvenes se sentían "indignados", es decir irritados, enfadados vehementemente con los políticos de siempre, porque siempre, después de todo, vienen siendo los mismos, salvo honrosas excepciones que son tan pocas que lamentablemente terminan siendo opacadas por esa abrumadora mayoría de convenenciosos, aunque ahora la matadora Tait les dio uno de esos zurdasos que no solo les dejó moretones de conciencia sino que le ha permitido a ella ponerse del lado donde se debe estar. 
En fin, la cosa no ha terminado, hay que continuar hasta que se modifiquen el reglamento que dice que es el Congreso el que tiene que elegir a los representantes del Tribunal Constitucional y la Defensoría del Pueblo, pero todavía se puede ir más allá, porqué no pensar elevar el perfil del candidato al Congreso, para que sean personas probas que realmente nos representen. No, los congresistas no son los padres de la patria, lo somos nosotros, el pueblo, la ciudadanía, nosotros decidimos quiénes nos representarán y venimos siendo timados, como padres de esta patria es momento de reflexionar más y asegurarnos que nuestros hijos hereden un mejor país y que este país esté siga un franco camino para que logre la grandeza que se merece.